UNA VERDADERA MESA QUE COMUNICA INCLUYENTEMENTE….
Por: JAIME MAURICIO GAITÁN GÓMEZ
Comunicar bien, oportuna y pertinentemente, fortalece a la sociedad.
Bajo esta premisa, un grupo de líderes y liderezas en condición de discapacidad, asumieron desde ya hace más de seis años, el reto de que la información relacionada con la población que representan, deje de ser un tema marginal, como venía siendo tratado por los grandes medios de comunicación.
El Periódico Proclama en cabeza de su director, Nelson Julián Villamizar, convocó en el año 2005, a periodistas y personas con trayectoria en los caminos de la comunicación comunitaria, a quienes los unía el interés y la vocación “heroica” de divulgar aquellas noticias relacionadas con este tema.
La discapacidad para los grandes medios masivos, solo les resulta de interés cuando basados en el “amarillismo”, la publicación de alguna historia sobre una persona con esta condición, les ofrece réditos entre sus lectores, oyentes o audiencia, pues en esas ocasiones, los comunicadores sociales que publican sus piezas periodísticas en los medios reconocidos por sus altos índices de “ratings”, les da la oportunidad de generar “historias” de superación emulando los “realities” en los que los protagonistas, se “roban” los corazones del público, no por mostrar virtudes enmarcadas en la sensatez, sino en la falsa ilusión de ser protagonistas de acciones supra normales, con la idea que de esa forma, sus audiencias tendrán empatía “masoquista” y así, vender la sensación que tanto ellos en su rol de “buenos” comunicadores sociales como los medios que les publican sus historias (con el mismo criterio de las historietas de superhéroes) están haciéndole un “favor” a quienes viven condición de discapacidad.
Pero la verdadera motivación de publicar este tipo de historias, es que los medios masivos pueden vender más ejemplares o espacios con rellenos de corte “rosa” como las columnas dedicadas a los temas frívolos del corazón.
Eso ha traído como consecuencia que ni los proyectos, acciones ni verdaderas necesidades de las personas con discapacidad, sean divulgadas por los medios masivos que son consumidos por el gran público ávido de historias frívolas, público que le huye a aquellas realidades que no les gusta y por tal motivo, la marginalización de la población en situación de discapacidad, se hace más lesiva en función de la equiparación de oportunidades que debería permitir la reivindicación de sus derechos.
Esta situación fue la que motivó al Periódico Proclama en cabeza de Nelson Julián Villamizar y a las otras organizaciones y medios que atendieron el llamado, para tomar “el toro por los cachos” y asumir la tarea de divulgar el tema de la discapacidad entre la población con esta situación y entre los actores gubernamentales que lo manejan, creando una instancia de participación en la que los medios y las organizaciones que la conformaron, para que constituidas como mesa de comunicación, produjeran piezas y estrategias para que la información sea tratada en la forma que corresponde de acuerdo a las necesidades pertinentes.
Luego de varios intentos, durante el año 2005, Corprocultural, Acempreliv, Disnet Pres, la Corporación PUNTO VISIÓN, Afrasuperar, Corpocyma, ACPHES, El Relator y el Periódico Proclama, las que sostuvieron una serie de reuniones, formalizaron la Mesa de Comunicación, Inclusión y Discapacidad de Bogotá, MCIDB, siendo el Centro de Rehabilitación para el Adulto Ciego, CRAC, el escenario que permitió ese propósito.
La MCIDB creó la imagen corporativa que identifica al Sistema Distrital de Discapacidad, imagen que sirvió para identificar el proceso por medio del que se construyó la Política Pública de Discapacidad ; hizo parte como grupo sectorial en ese mismo proceso, quedando gracias a su intervención, en el texto del Decreto 470 del 12 de octubre de 2007, el derecho a informar y a ser informado idóneamente, como uno de los derechos inherentes de los y las bogotanas con discapacidad; promovió en el año 2007, la creación de la red de comunicadores comunitarios con discapacidad, en el marco del proceso de fortalecimiento llevado a cabo ese año por el Instituto Distrital para la Participación y Acción Comunal, IDPAC; produjo una serie de treinta microprogramas radiofónicos por medio de los que se daba a conocer las funciones de las instancias del sistema distrital de discapacidad, como el consejo distrital, los consejos locales o la secretaría técnica, y además, con esos microprogramas se promocionó la política pública y se incentivaba a la participación de la población en situación de discapacidad en esas instancias y en las elecciones de los consejeros representantes de las seis discapacidades en las mismas.
En el año 2009, asumió la representación del sector de la discapacidad ante la Mesa Distrital de Comunicación y Medios Alternativos, la que asesoró la implementación de la política pública de comunicación alternativa y comunitaria del distrito.
Actualmente, a través de una iniciativa formulada por la Corporación PUNTO VISIÓN, una de las organizaciones que conforman a la MCIDB desde su creación, se está implementando la Promotora de Medios Alternativos para el Desarrollo Social, PROMEDIAL, la que tendrá funciones de central de medios y de agencia de comunicación, siendo esta una de las iniciativas que durante los meses de noviembre y diciembre de 2010, recibieron el apoyo del IDPAC en el marco del más reciente proceso de fortalecimiento a organizaciones llevado a cabo por este instituto distrital, con el propósito de fortalecer la divulgación de la información acerca de la discapacidad y permitir la sostenibilidad y supervivencia de los medios alternativos especializados en este tema y que entre otros, hacen parte de la MCIDB.
Aunque el camino es arduo, tanto la red de comunicadores comunitarios con discapacidad, los medios que conforman la MCIDB como en el futuro inmediato, las actividades de PROMEDIAL, están constituyéndose en los pilares que harán que el postulado “Comunicar bien, oportuna y pertinentemente, fortalece a la sociedad”, en el caso de la comunidad con discapacidad, implique la reivindicación de sus derechos, la desmarginalización de la misma y que ella pueda ejercer ese derecho explícito en el Decreto 470 (informar y ser informado), y de esa manera, permitir la inclusión, objetivo de esta mesa que sí comunica incluyentemente.